El Internet de las Cosas en las Smart Cities es ya una realidad. Así es como empezó AgroPestAlert, otro de los proyectos participantes en Orizont, desarrollando un proyecto de Internet de las Cosas para ciudades inteligentes. El problema es que, a pesar de toda la exposición mediática que hay actualmente sobre este asunto, “las ciudades no tienen suficiente dinero para hacer inversiones en ello”.
Entonces fue cuando Telefónica I+D Chile sacó un reto para combatir la plaga de la polilla de la vid, que tantos problemas estaba dando en el país. Pero no solo querían combatirla, sino que buscaban dar un paso adicional para poder detectarla. De ahí surgió AgroPestAlert.
Louis Gerardo Holder Rodríguez, CEO de AgroPestAlert, nos contó que el objetivo principal de este proyecto es la vigilancia y el control de plagas agrícolas en tiempo real y cómo trabajó, junto con el resto de fundadores, para dar sus primeros pasos en Chile. ¿Quieres seguir conociendo de qué se trata? ¡No dejes de leer!
¿Qué es lo que le hizo animarse a participar?
Yo, junto a todo mi equipo, ya hemos trabajado conjuntamente en diversos proyectos tecnológicos que han tenido resultados de éxito. Esto es lo que nos animó a seguir adelante con este proyecto y a participar en Orizont.
¿Qué espera de Orizont en el próximo año?
De Orizont esperamos su apoyo. Es fundamental el asesoramiento externo para saber de qué manera enfocarnos en el mercado. Para nosotros está siendo un gran impulso. Nuestro objetivo, ahora mismo, es llegar a agricultores pequeños y/o grandes para que nos contraten, según su problema y su zona. Pueden ser plagas distintas, pero el dispositivo siempre es el mismo.
De manera detallada, ¿en qué consiste su proyecto?
Actualmente, las plagas en los campos se vigilan y controlan mediante un sistema de captura y conteo presencial en trampas que atraen a las especies con feromonas para contarlas manualmente, lo cual supone un elevado coste de mano de obra. Y además puede ser demasiado tarde para evitar los daños.
Sin embargo, nosotros ofrecemos una propuesta muy innovadora basada en un trabajo científico, que es la detección y la identificación de la plaga con un aparato que utiliza una cortina láser. Su funcionamiento es muy sencillo: cuando el insecto atraviesa esta cortina láser volando, origina una fluctuación en esta. Unos sensores lo convierten en variaciones de voltaje y esto nos permite calcular la frecuencia de aleteo. Como la frecuencia de aleteo es específica de cada especie, la podemos determinar con un alto grado de confiabilidad.
Toda esta información se transmite por redes inalámbricas, para disminuir el consumo de ancho de banda, y se va recabando en un servidor que tiene unas aplicaciones de minería de datos e inteligencia artificial.
A todo esto hay que añadir que cuando recogemos una detección de plaga, también recogemos variables del entorno, como la temperatura y la humedad, generando una base de datos que permite hacer correlaciones con la aparición de dicha plaga. Así es como vamos construyendo un modelo con el que saber en qué condiciones aparece esa plaga.
¿Cuáles son sus ventajas competitivas?
El principal valor que tiene AgroPestAlert es que utiliza una tecnología que resuelve un problema planteado hace 40 años, que es la identificación de insectos por el ruido que hacen las alas. Identificarlos por el ruido de sus alas no es nada fácil, ya que existe gran contaminación sónica en el campo. Sobre todo, por el viento.
Aquí es donde está nuestra ventaja competitiva, ya que AgroPestAlert no identifica el insecto por el sonido de sus alas, sino que detecta lo que origina ese sonido. Es decir, la vibración. Y esto sí que es inmune al viento o al movimiento. AgroPestAlert mide la vibración de las alas, que es lo que causa el sonido. Lo que quiere decir que va directamente al origen del sonido.
Además de esta ventaja, todo el aparataje es súper económico y duradero.
¿Dónde se ve dentro de un año?
En nuestro proyecto, la tecnología tiene dos aplicaciones: una agrícola y una de prevención de enfermedades humanas transmisibles por picaduras de insectos. Es decir, está pensada para el campo, pero es posible llevarla hacia el área más sanitaria.
En el caso de la detección de insectos en la agricultura, el impacto, en términos de desarrollo sustentable, es muy alto, ya que con las tecnologías presentes actualmente, esta detección y control de insectos en la agricultura es como la última frontera manual que hay en la agricultura moderna.
Pero, por otro lado, a nosotros nos gustaría que nos llegaran a contratar las ciudades, ayuntamientos, gobiernos… para esa parte más sanitaria para el control de enfermedades transmisibles, ya que también tiene un gran impacto social detrás.
¿Qué mentor se les ha adjudicado?
Nuestros mentores son Intia y Consebro. Ya hemos tenido varios encuentros con ellos y estamos muy contentos con todo lo que nos están aportando. Agradecemos muchísimo su profesionalidad.
¡Mucha suerte, AgroPestAlert!